domingo, 19 de diciembre de 2010

Bariloche - Parque Nacional Nahuel Huapi ( 1 )


Detalle del Centro Cívico
Ya en al Patagonia llegamos a San Carlos de Bariloche, ciudad  situada a orillas del lago glaciar Nahuel Huapi ( "isla del tigre" en legua mapuche). Un paseo por la ciudad nos lleva desde el Centro Cívico (plaza no muy grande pero pintoresca y acogedora) hasta la Catedral neogótica, pasando por la capilla de madera de la
Inmaculada. En el recorrido  atravesamos la calle Mitre, principal arteria comercial, donde destacan las chocolaterías, fábricas de bombones traídas por los colonos suizos y que hacen las delicias de los visitantes golosos como yo, pues están a un precio muy bueno y además son exquisitos, sobre todo, los rellenos de dulce de leche.

Para conocer un poco la zona hacemos algunas excursiones. Desde Bariloche a Villa de La Angostura (a 40 km de Chile) salimos por la Nacional 40, la famosa ruta que une los pueblos de la cordillera, y bordeamos el lago, que como todo lago que se precie tiene su mostruo “El Nahuelito” y al que los viejos del lugar aseguran haber visto en alguna ocasión. Desde la salida, la belleza  del paisaje( los Andes con sus cumbres nevadas, el valle, el lago ...) nos inunda y nos gustaría ir parando en cada recodo para poder capturarla con nuestras máquinas, pues a veces los miradores no te muestran lo que ves por el camino o cuando llegas está nublado o  lloviendo como pasó ese día.




     Abandonamos la N-40 y la estepa patagónica y nos adentramos en el parque y en el bosque, donde contrasta el verde de los árboles con el amarillo de la retama (allí es primavera), mucho más intenso que el que podemos ver aquí, o por lo menos lo parece.



El lago Nahuel Huapi, Bariloche al fondo y detrás los Andes


         Nos encontramos con árboles autóctonos como la araucaria, ciprés, lenga y el cohiué con su hongo particular llao llao ("rico rico" en lengua mapuche), que bien se puede confundir con frutos.









En Villa la Angostura las casas antiguas son todas de madera de ciprés, a cual más bonita. En la actualidad les obligan a mezclar madera y piedra, ya que temen por sus bosques y tienen una fuerte ley de protección, aunque eso no impide que en el interior haya talas de árboles, pues es tal la frondosidad que es casi imposible de vigilar  a pesar de que tienen bastantes guardias forestales. Terminamos en el lago Correntoso,  cuyas playas son de origen volcánico y la lluvia no nos deja estar más tiempo.

Lago Correntoso

Playa volcánica



Río Correntoso y al frente Chile



4 comentarios:

  1. He visto todas las fotos y me han dado más envidia todavía que lo que cuentas.

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  2. Esa zona era desconocida para mí, ahora siempre diré que fuiste mi guía. Gracias y espero más. Besito

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  3. Vaya, qué bonitas vistas y paisajes parece haber! Qué envidia, con lo que me gusta viajar... :)

    Me ha gustado mucho lo que has escrito: tan detallado.

    Un saludiño

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  4. Hermana, la intensidad del color se mide por la luz y los sentimientos. ¡Vamos que tú estabas pletórica! (Eso lo dice Viqui y yo lo corroboro)

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