Tren del Fin del Mundo en la estación del mismo nombre |
Dejando atrás Ushuaia, y tomando un camino de ripio, que es la Ruta Nacional nº 3, nos adentramos en el Parque Nacional Tierra del Fuego, hasta llegar a la estación del Fin del Mundo ubicada dentro del propio parque. El tren sale y se interna en el Cañón del Toro. Cruza el río Pipo sobre el “Puente Quemado”, donde podemos observar las ruinas de madera del viejo puente bajo las nuevas vías. Y después de una parada en la estación “Cascada La Macarena” para ver la cascada, nos adentramos en el parque donde continúa atravesando sectores que nos muestran la huellas que dejaron los presos en su rutina diaria, como puede ser el cementerio de árboles, de donde sacaban la madera que necesitaban.
Cascada La Macarena , no pude subir hasta arriba me dolían mucho las piernas y había muchas escaleras |
Cementerio de árboles talados por los presos entre 1904 y 1947 años en los que funcionó el penal |
Vista desde el tren |
Después de bordear el turbal (una masa esponjosa originada por la acumulación de materia orgánica), llegamos a la estación del Parque, final del trayecto. Allí volvemos a coger el autobús que nos llevará hasta el comienzo de uno de los senderos peatonales donde iniciaremos nuestro recorrido a pie, que nos permitirá pasear y adentrarnos en el parque.
Lenga |
Durante el recorrido, se va alternando el bosque de lenga, guindo y ñire, con un sotobosque abierto, sobre todo, de musgos y helechos que nos acompañaran durante todo el camino.
Llao llao o pan de indio (los indios mapuche lo comían), hongo comestible que crece adherido al ñire, a la lenga y al coihue, árboles muy comunes en la Patagonia, al sur de Chile y de Argentina. El nombre llao llao significa, además, en lengua originaria mapuche: rico rico, dulce dulce.
Orquidea |
Como es primavera ya se dejan ver algunas flores, como las del calafate (michay) y las orquídeas. Así, mientras se nos van hundiendo los pies en los extensos turbales, llegamos a la laguna Negra, que debe su nombre, precisamente, a la presencia de dichos turbales, que son los que le hacen tener ese color oscuro.
Desde la ruta, y sin abandonar los bosques, se accede directamente a Bahía Lapataia, y de ahí al mirador, donde se tiene una vista panorámica de la Bahía.
Durante el recorrido habíamos visto con sorpresa carteles como este sin entender mucho.
Fue al montarnos en el autobus cuando alguien dijo ¡Un zorro! Y allí estaba, un zorro rojo, una variedad particular de la Tierra de Fuego
Me gustaría hablar de los indios yámana que son lo santiguos habitantes de estas tierra pero se haría demasiado largo
Castorera abandonada |
Siguiendo nuestro paseo, llegamos al arroyo Los Castores, donde vemos el sistema de diques que estos animales han construido y el impacto ambiental que provoca.
Desde la ruta, y sin abandonar los bosques, se accede directamente a Bahía Lapataia, y de ahí al mirador, donde se tiene una vista panorámica de la Bahía.
Laguna Lapataia( de origen glaciar) y monte Cóndor |
Avutardas al lado de la laguna, el macho con la cabeza blanca |
La famosa Ruta Nacional Nº 3 , camino de ripio, al llegar a la laguna la bandera indíca que se acaba que hasta ahí llega Argetina |
Fotografía obligada. En este punto se acaba la Ruta Nacional Nº 3 |
y no hay más ¡Qué sensación!
Durante el recorrido habíamos visto con sorpresa carteles como este sin entender mucho.
Fue al montarnos en el autobus cuando alguien dijo ¡Un zorro! Y allí estaba, un zorro rojo, una variedad particular de la Tierra de Fuego
Me gustaría hablar de los indios yámana que son lo santiguos habitantes de estas tierra pero se haría demasiado largo
Se acabó la excursión y vuelta a Ushuaia a tiempo para tomar una buena cena, que teniendo en cuenta que a medio día habíamos probado el cordero patagónico, ahora no quedaba mas remedio que tomar pescado o bien una centolla al peso en La Cantina de Freddy o merluza negra en en el restaurante Tante Nina al lado del puerto. Dificil decisión